lunes, 30 de octubre de 2006

Las fábulas de Mr Roboto: La clase de Francés

Era el primer día de curso. Mr Roboto recorría nervioso los pasillos camino del nuevo aula donde pasaría el resto del año. El sonido bullicioso de los alumnos charlando animadamente le tranquilizó, y pronto, invitado por antiguos compañeros, se unió al jolgorio dominante.

Estaba comentándole a quien quisiera escucharle que Marilyn Manson no era el niño de Aquellos maravillosos años, cuando el silencio cayó sobre el lugar. Como en las películas de suspense, allí estaba la profesora de francés (y del idioma también) una vieja conocida de cursos anteriores.
Rápidamente cada uno ocupó su asiento y la profesora comenzó a pasar lista:

- Anacleto Ramirez.

- Presente.

- Aurelia pellón.

- Sa.

- Mr.... vaya, vaya- dijo para sí sorprendida mientras intentaba hallar entre el bosque de caras que se arremolinaban junto a ella, la más que familiar faz de Mr Roboto, lográndolo a los pocos segundos.
Tras el saludo protocolario: cuanto tiempo, ¿va todo bien?, ¿qué tal el verano?, ¿me prestas el Seat Panda el fin de semana?... empezó la clase.

- Para recordar tiempos pasados, comenzarás tu Mr Roboto, a ver, ¿donde te gustaría trabajar a ti?
Hasta entonces la idea de Mr Roboto de recordar viejos tiempos, consistía en una cena a la luz de las velas en la terraza de una suite imperial del Waldorf Astoria, llevando poca ropa además, pero como no iba a ser posible, buceó en lo más profundo de su mente en busca del vocabulario que tanto le había costado memorizar, hasta que finalmente fue capaz de decir:

- Je veux travailler a la gare.

Estaba convencido de que eso bastaría para que la profesora fijara su atención en otro, pero en lugar de ello, la estupefacta maestra quiso saber qué es lo que llevaba a alguien a no aspirar a un puesto de funcionario.

-¿ En qué puesto exactamente? - todo ello en el perfecto francés que tras años de desuso ha olvidado, pero que en aquel entonces le sirvió a Mr Roboto para responder:

- Barriendo el suelo.

Había olvidado las palabras que usaban los gabachos para referirse a banquero, político o astronauta, solo se le ocurría eso. En ese momento echó de menos no tener un diccionario a mano o haber nacido en París.

Moraleja: sin idiomas, a lo más que llegarás será a barrendero (que con el sueldo que tienen no está nada mal tampoco)

martes, 24 de octubre de 2006

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Pornotrix

Un suntuoso serrallo de un califa cualquiera. Innumerables cortinas penden del techo creando múltiples recovecos. El jadeo de una chica se va haciendo más audible mientras la camara va sorteando el laberinto de cortinas, hasta enfocar a una exhuberante peliroja con los brazos alzados, amarrados por sendos trozos de una tela que parece seda. Sus piernas están en vilo, sostenidas por un fornido joven que la penetra salvajemente.

Varias posiciones aderezan la escena, siendo el resultado de todas ellas el mismo: una mujer jadeante de placer. Finalmente el joven eyacula en la cara de la chica y se tumba junto a ella a disfrutar el reposo del guerrero. Sin darse cuenta se queda dormido. Oscuridad. Una suave voz en off perteneciente a una mujer se introduce en sus sueños llamándolo.

Voz en off: Cirineo, cirineo.... Despierta!!!

El fornido joven abre los ojos. Se habia quedado dormido en su mesa de trabajo mientras navegaba por páginas porno. En el monitor se puede ver un video de una película porno con la escena que hace poco estaba viviendo. De los holoposters que cuelgan de las paredes de su habitación se proyectan imagenes tridimensionales casi reales de mujeres en posturas eróticas.

Cirineo (en voz baja para si): quien midiera 30 cm y estuviera hecho de luz....

No ha hecho más que levantarse y recoger un paquete de cleenex, cuando llaman a la puerta. Va a abrir.

Tecnoyonki: Hey Cirineo, tio, ¿tienes mi mierda?

Cirinero entra en su apartamento, en busca de un cd con shows lésbicos entre transexuales y se lo da al Tecnoyonki.

Tecnoyonki: Este es mi hombre. Eres el hacker más jodidamente bueno que he conocido. Vente, te invito a una orgia.

Cirineo: no se, he tenido una pesadilla. ¿Alguna vez has soñado que vives una gran mentira, una vida que no es la tuya y has tenido la sensación de que pronto alguién te la arrebatara?

Tecnoyonki: Claro, siempre que me quedo sin pirulas, venga vistete que las chicas se nos van a enfriar.

Cirineo entra en su apartamento por última vez. Se quita el pijama de ositos que tenia puesto y se pone una gabardina de cuero. Se va dando un portazo. Tras un corto viaje en coche llegan a un viejo almacen donde se esta celebrando una fiesta por todo lo alto. La gente copula en el sitio más insospechado. Cirineo deja su gabardina sobre la encargada del guardaropa que se está masturbando y se pierde entre la multitud. No sabe a que chica ensartar primero. A su espalda una mujer con la misma voz del sueño le llama.

Virginity: ¿tú eres Cirineo verdad?

Cirineo: el mismo que viste y calza, bueno más lo de calzar ya me entiendes. ¿Y tú eres....?

Virginity: Virginity
Cirineo: Si sigues junto a mí, no por mucho tiempo nena.
Virginity: miralo que gracioso. Y dime, ¿Por qué te llaman cirineo?

Cirineo mira hacia su entrepierna.

Cirineo: Júzgalo por ti misma

Virginity asiente con la cabeza, parece indiferente.


Virginity: si, ya veo que tienes un buen... cirineo.

Cirineo: En realidad me llamo Manolo, pero es un nombre carente de chispa, de fuerza, de garra, vamos que es una mierda de nombre para un hacker. Imagínate alguien que te ve y dice: "Mira, por ahi viene el hacker Manolo". No me tendrian respeto.

Virginity: Ajá.. te he estado observando un rato y me preguntaba... ¿quieres hacerme el amor?

Cirineo: (enseñando las manos) ¿dónde crees que estoy aguantando mi copa?

Virginity: bien, sigueme entonces.

Como la abeja que sigue a la miel (en caso de que la miel que se moviera), Cirineo sigue a la extraña chica a un edificio cercano, lejos de la bacanal. Virginity es muy rápida y pronto se pierde en la oscuridad. A tientas Cirineo recorre los oscuros pasillos, hasta que unos poderosos brazos tiran de él al interior de una habitación que al instante se ilumina. En el centro de la misma, sentado en una butaca, se encuentra un hombre corpulento de tez oscura. Le flanquean dos espectaculares chicas, una rubia y Virginity, que mira distraida al suelo.

Morfalo: Bienvenido Señor Anderson, tome asiento.

Un sofa aparece de la nada tras Cirineo, que busca asombrado el sitio de donde habrá salido. Al no encontrarlo se sienta y escucha pacientemente lo que tiene que decirle el doble de Shaft.


Morfalo: Mi nombre es Morfalo, seguro que has oido hablar de mí.

Cirineo: pues la verdad es que no.

Morfalo: No importa, soy el lider de un grupo antisistema.

Cirineo: ¿Uno de esos que queman mcdonalds para luego irse a comer a la competencia?

Morfalo: No Cirineo, y como no dejes de interrumpirme te metere un polo de chocolate por donde nunca te ha dado el sol. Bien, como iba diciendo, tanto ellas (señalando a las chicas) como yo, somos humanos liberados. No se si te has dado cuenta Cirineo, pero la realidad en la que vives no existe.

Cirineo: ya me extrañaba a mi que Paulina Rubio tuviera éxito...

Morfalo: ese es uno de los efectos colaterales del sistema. En realidad todo esto que ves, es producto de las máquinas. Unas terribles máquinas que en estos momentos amenazan la existencia de la única ciudad libre que nos queda a los hombres. Son los vibradores, no se si alguna vez has visto uno.

Cirineo: En una fiesta algo extraña en la que abundaba el cuero. Sí, se lo dolorosos que pueden llegar a ser.

Morfalo: Cirineo, estás aquí porque el oraculo te ha designado como el elegido.

Cirineo: ¿el elegido para qué? y ya que estamos, me parece muy bien todo esto que me estas contando, pero ¿es necesario que la rubia te la esté chupando mientras hablamos? es que me desconcentra.

Morfalo: eres el elegido para derrocar al creador de Pornotrix (el mundo artificial en el que nos movemos ahora) y detener así la amenaza que pende sobre nuestro pueblo. Sólo tú puedes conseguirlo, pero no te podemos obligar a nada, es tu decisión. Y ahora vamos a follar un poco que hemos hablado demasiado y la gente se va a coger un catálogo de modas (Virginity acerca una bandeja a Cirineo con dos preservativos) Si eliges el rojo, despues del polvo no recordarás nada de lo que hemos hablado, si eliges el azul un nuevo mundo se abrirá ante tí.

Cirineo: ¿y además del nuevo mundo ese, se abrirá de piernas la morena? (señalando a Virginity)

Morfalo: por supuesto.

Cirineo: Entonces venga esa goma azul cielo.

En las dos butacas se entremezclan las piernas, las lenguas y los fluidos corporales. El coito acaba pronto.

Morfalo: Bien, ahora vamos a ver al oraCULO. Tenemos que asegurarnos de que eres de verdad el elegido. Ya llevamos tres chascos.

Tras ponerse (sólo) sus respectivas gabardinas, los cuatro suben a una limusina con la que recorren la ciudad. Les persiguen en un coche un par de agentes vestidos de negro. En el asiento de atras de la limusina, la rubia le hace una felación a Cirineo hasta que este eyacula sobre su cara una pelota de ping pong. Cirineo se sorprende.

Rubia feladora: No te preocupes, es un rastreador de Pornotrix, ahora ya no podra seguirnos nadie.

La felatriz coge la pelota y la lanza al interior de un bar llamado "La Ostra Azul", despistando a los agentes que se introducen en el mismo, pensando que Cirineo está allí. A los agentes no se les vuelve a ver el pelo en toda la película.

Finalmente la limusina de Morfalo se para en un burdel de los bajos fondos. Mientras las chicas esperan en el coche, los hombres suben al piso de la oraCULO. Tras pasar por una sala en la que un grupo de prostitutas aprenden a colocar un condón con la boca, llegan a la habitación del oraCULO: una afroamericana de esplendoroso trasero, que tumbada en la cama redonda que preside la estancia, les hace un gesto con la mano. Morfalo asiente, deja que Cireneo entre sólo y cierra la puerta.

Cirineo: oiga, esto me va a costar muy caro ¿verdad?

oraCULO: no te preocupes, paga el negro de la puerta. Tú ven aquí y follame.

Polvo místico entre la oraCULO y Cirineo, cuyas auras se iluminan con cada embestida. Hasta que llega el momento del climax para nuestro heroe.

oraCULO: cuidado, no te corras en mi cara.

Cireneo se corre en tiempo de bala en su cara, desoyendo su advertencia.

oraCULO: aprende esta lección ¿si no te hubiera dicho que no te corrieras en mi cara, te hubieras corrido?

Cirineo: si no te hubieras puesto de rodillas ante mi polla con la boca abierta, haciendome gestos con la lengua y los ojos.... no tengo ni idea. ¿pero que se puede aprender de eso?

oraCULO: que en la vida real a las mujeres no les va que te derrames en su cara, sin embargo yo disfruto como una perra.

Cirineo: eres muy rara ¿lo sabías?

oraCULO: será el agua. Puedes irte Cirineo. Recuerda: para dar con el Pajillero deberas encontrar al putero de las llaves, es todo lo que tengo que decir. (hace una ligera pausa, intentando recordar algo) Ah, son 50 dolares, diselo al morenazo antes de irte.

Una vez reunidos con las chicas, se desconectan de Pornotrix yendo a parar al interior de una nave.

Morfalo: Virginity, enseña la nave a nuestro invitado, yo voy a ver si doy con el paradero del putero.

Virginity: por supuesto. (dirigiendose a Cirineo) acompañame.

Tras un recorrido por las distintas dependencias de la nave, llegan a una sala con varios monitores y un sillón de cuero desgastado frente a una enorme pantalla que muestra en esos momentos a un innumerable grupo de consoladores abriendose paso en la roca.

Virginity: Y este es el puente de mando de la "concha voladora". Como verás es algo rudimentario, pero en Pollón carecemos de los adelantos de Pornotrix. Eso que ves en el monitor es el ejército que debes detener.

Cirineo no presta atención a lo que le dice, pero la mira fijamente. Dulcemente le coge las manos y las acerca a su pecho.

Cirineo: Virginity.... yo.... te quiero...

Virginity: (interrumpiendo su frase) yo tambien te quiero Cirineo.

Cirineo: .... echar un polvo.

Virginity: ...... bueno (se queda pensativa) eso tambien me apetece.

Cirineo y Virginity retozan como conejos durante su época de celo. Para una descripción detallada del polvo, esperad a la película. Terminando con la consiguiente corrida en los pechos de la morena defensora de la humanidad, con efecto de tiempo de bala incluido. Tumbados uno junto al otro en una cama que ha aparecido en el puente de mando de la "concha voladora" se fuman el cigarrito de despues.


Cirineo: Oye Virginity, ¿cómo estás tan segura de que yo soy el elegido? Hasta hace unos días sólo era un hacker del montón, bueno era el mejor pero está mal que yo lo diga ya sabes, y ahora me encuentro al mando de una misión que intenta evitar el caos y la destrucción.

Virginity: despeja tus dudas. La oraCULO me dijo que únicamente el elegido me desvirgaria.

Cirineo: pues cuando te has acostado conmigo muy virgen no eras ¿eh?

Virginity: esos son pequeños detalles, además lo dice el guión y punto.

Morfalo irrumpe en la habitación y se lleva a Neo a la sala de conexión. Es hora de volver a Pornotrix. Van en busca del putero de las llaves, el guardián del Pajillero, el único que puede impedir la devastación de Pollón. Son transportados al interior de un bus atestado de rubias pertenecientes al equipo de bikini de Noruega. En contra de lo que espera la gente, no se monta una orgía con las rubias deportistas. Se bajan en unos grandes almacenes.

Morfalo: es aquí. En la sección "caballeros".

Tras unos interminables minutos en las escaleras mecánicas llegan a dicha sección. Un tipo oriental con un mantel que dice "No cobro a las guapas" reconoce a Morfalo y se pierde tras uno de los probadores. Presto le siguen y en lugar de un espejo con doble fondo, se encuentran con un largo pasillo que recorren hasta llegar a una inmensa estancia rectangular a cuyas lados se distribuyen varias camas, todas ocupadas por jovenes diosas nacidas de los sueños de un magnate del porno, menos una de ellas que desentona por la asimetria exagerada de sus rasgos. Enmedio de ellas, está el oriental.

Putero de las llaves: Soy el putero de las llaves, pero pueden llamarme "puti" ¿en qué puedo ayudarles?

Morfalo: queremos ver al Pajillero, puti.

Putero de las llaves: ya conocen la condición, deberan ser capaces de abrir la puerta.

Cirineo: Pero si aquí no se ve ninguna, además no tengo ninguna llave encima ¿piensas que como voy vestido puedo llevar algo tan frio como una llave de metal?

Putero de las llaves: Andas desencaminado mi joven amigo, Pornotrix surgió del sueño onírico de nuestro creador, todo es una metáfora. El coño de una mujer es la puerta de la vida, y el pene del hombre la llave que la abre. Sólo tirandote a una de ellas podras llegar a las estancias del Pajillero, amo y señor de Pornotrix.

Morfalo se pasea entre las filas de chicas y señala a la poco agraciada.

Morfalo: Cirineo, creo que es ella. Ella es la puerta.

Cirineo: bueno pero habrá que probar si con las demás se puede ir a alguna parte. ¿quién me va a decir que mañana no voy a tener ganas de ir al cine? ¿y a quién le pido el coche eh?, quizás alguna de ellas me lleve allí.

Morfalo: pero vas a perder el tiempo, un tiempo valioso para los habitantes de Pollón. Y es...

Cirineo: lo sé, pero es que la otra no tiene sex appeal, no hay feeling, ni atracción, en resumen es feísima. Además aquí se hace lo que mande el elegido que soy yo, que para eso le hice ver el cielo a Virginity.
Morfalo: como si hubieras sido el único....

Pero Cirineo no ha podido escucharlo, porque se ha lanzado sobre un par de rubias que le reciben con las piernas abiertas.

Tras dejar exhaustas a 2 rubias, una morena y una pelirroja, a Cirineo no le queda más remedio que afrontar su destino. Se dirige apesadumbrado a la cama de la fea, que le espera dando botes de alegria en ella.

Cirineo (a Puti): ¿no viene mucha gente a visitar al Pajillero verdad?

P.LL.: muchos han venido, pero ninguno ha llegado a verlo.

Cirineo: por qué será que no me extraña... Venga hija, dejame ver tu altar, que le voy a poner una "vela"

Poco a poco va acercando su pene aún duro como una roca pese al trabajo ejercido a la vagina de la fea, cuando está a punto de entrar en su "cueva del placer", cierra los ojos

Morfalo: venga, de un tirón, asi será menos desagradable.

Cirineo: todo por la patria!!!

De una embestida, hunde la soberbia longitud de su falo en las entrañas de la fea, siente el calor que lo rodea, pero al abrir los ojos, se encuentra en mitad de una estancia en penumbras, con cuatro monitores en los que se pueden ver distintos actos sexuales. Frente a ellos se sienta un hombre. No tiene más de 45 años, vestimenta desaliñada: vaqueros y una camiseta que dice "Bésame soy sysadmin".

Cirineo: tú debes ser el Pajillero del que tantos hablan...

Pajillero: ¿qué hombre no lo es?

Cirineo: pues tienes razón (echando un vistazo a su alrededor) oye, esperaba esto algo más.... tecnológico. Queda un poco cutre esos cuatro televisores ahí. Ni siquiera son de plasma.

Pajillero: No has venido aquí a hablar de mi pauperrimo mobiliario Cirineo, déjate de chuminadas.

Cirineo: Cierto, he venido a impedir la invasión de los consoladores asesinos.

Pajillero: Jajaja llegas un poco tarde para eso, contempla el monitor (coge un mando a distancia universal de una mesilla y apunta nerviosamente a uno de los televisores con escaso éxito, pronto se va impacientando) vaya por dios (golpeando el mando a distancia contra su rodilla) se le han acabado las pilas. ¿Serias tan amable de poner el canal 14? Si (señalando al primer monitor de la izquierda) Hoy día sin pilas recargables no vas a ningún lado. En fin, contempla la perdición de tu pueblo

En el monitor se suceden imagenes caóticas de enormes vibradores de latex que sobrepasan las murallas de Pollón, para introducirse en las humedas váginas de las habitantes que intentan desesperadamente desembarazarse de ellos. Estas comprueban pronto que igual los consoladores no son tan malos y comienzan a disfrutarlos, uniendose en grupos de chicas que se autoestimulan oral y manualmente. Tras acabar con las pilas de todos y cada uno de los vibradores, la guerra termina con un inesperado resultado. Las mujeres abandonan Pollón en busca de frios compañeros de cama a los que poder recurrir juegue el Madrid o no. Los hombres se quedan entristecidos con sus miembros en la mano.

Pajillero: Jajajaj, habeis perdido. Ahora os tendreis que matar a pajas como hago yo.
Cirineo: he fracasado en mi misión.

Pajillero: Te equivocas Cirineo, desde el principio tu misión fue llegar hasta aquí junto a mí: tu creador.

Cirineo: pero ¿para que?

Pajillero: para follar, por supuesto.

Cirineo: no te ofendas pero no eres mi tipo, además si eres mi creador seria incesto. Tío eres un pervertido... ¿y además cómo es eso de que tu me creaste?

Pajillero: no seas bruto hombre, conmigo no. (Chasquea los dedos, y tras una puerta aparecen Virginity, Morfalo y la oraCULO.

Pajillero: venga hijos mios, a follar como animales.

Dejando de lado que teóricamente Virginity es su hermana (total, una vez más...) y olvidando de un plumazo el misterio de su origen, empieza una orgia que termina con un cumswapping entre la oraCULO y Virginity. La camara se va acercando a sus bocas repletas de semen....

Chorreones del mismo, se deslizan por la pantalla. Algunos se unen para formar la palabra FIN. (Asqueroso sí, pero a los degenerados que ven este tipo de películas seguro que no les importa,¿quién ha visto una película porno hasta el final?)


Epílogo: Se buscan actrices para los muchos papeles femeninos del film. Con el fín de ahorrar costes, me sacrificare y asumiré los roles de la totalidad de los personajes masculinos. Interesadas, ya sabeis mi mail.

miércoles, 11 de octubre de 2006

Sé lo que hicisteis el último verano.... azul

- Nooooo, nooooo, no nos moveran. Noooo, noooo, no nos moveran, porque...
- Cálla ya por dios. Un kilometro más así y salto del coche te lo juro. No se cómo se me ocurrió recogerte.
- Ay piraña, tú siempre fuiste el más bueno de todos. Tienes el corazón igual de grande que tu estomago...
- Y dale, que no me llames más piraña que con 36 años suena raro, que yo me llamo Miguel, leches. Y no estoy gordo, es un problema de hormonas.
- si ya, de las hormonas de los 4 pollos que te has comido antes cuando paramos a echar gasolina jijiji
Miguelito, alias el piraña, conducía por la Nacional 20 camino de un pueblecito de Málaga, cuando la figura de una hippy con guitarra haciendo autostop le hizo parar en la cuneta, con la esperanza de que le hiciera el viaje algo más "animado" (no se si me entendeis). Por desgracia para él, la oscuridad que imperaba a esas horas de la madrugada, le impidió distinguir los rasgos de la chica hasta que la tuvo sentada al lado. Se quedó sin habla: era Julia. La viej... la mujer con la que habia pasado aquel verano inolvidable en aquel pueblo inolvidable con aquella pandilla inolvidable, que sin embargo se habia olvidado de él.
Despues de separarse al finalizar aquel verano de hace 25 años, no se habian vuelto a ver. Con los mayores era lógico, entraron en el instituto y no querian saber nada de un pobre niño con problemas de integración debido a su sobrepeso que aún jugaba con los madelman; pero lo de Tito le dolió. Despues de las correrias que habian protagonizado juntos, tenia la esperanza de haber conseguido por fín un amigo en quien confiar. Pero cuando el primer día de clase, Tito habia pasado junto a él como si no le conociera, juró no volver a pensar en aquella panda de desagradecidos a los que tanto habia ayudado con su sapiencia.
Así pues decidió centrarse en sus estudios, terminando años despues la carrera de ingeniero informático o de telecomunicaciones, tanto da. Su vida era tranquila y algo aburrida, hasta que un par de días atras, recibió una extraña carta sin remitente, en la que se le citaba en una determinada dirección de Nerja, aquel pueblo cuyo recuerdo se habia esforzado por borrar.
Y de esa forma, sin saber por qué, se habia embarcado hacia la aventura (huyendo de paso de la polícia, que lo buscaba por delitos informáticos varios) y habia ido a encontrar a Julia, la pintora, la cual habia recibido la misma misiva que él.
Tras una delirante noche, entre canciones de Maria Ostiz y Janet, llegaron al amanecer a la plaza del pueblo. Junto a una fuente de la misma, sentados en la terraza de un bar, se apiñaban sus antiguos amigos. Aún Tamizados por el paso del tiempo y algo estropeados, seguian perfectamente reconocibles: Bea charlando distraida con Desi que parecia no hacerle mucho caso, y en la mesa de al lado, Javi y Tito echando un pulso mientras detras suya Pancho no paraba de llorar. El reencuentro fue cálido teniendo en cuenta que hacia años que habian perdido todo tipo de contacto.
- ¿y a Pancho qué le pasa?- preguntó el piraña, tras intercambiar con los demás breves descripciones de lo que han sido sus vidas hasta el momento.
- aquí fue donde Chanquete me dió 20 duros para que fuera a comprarle tabaco y dejó que me quedara con 3 cigarros- gimió de manera lastimera Pancho para a continuación seguir llorando.
Javi preguntó si ellos tambien habian recibido la misteriosa carta, Julia se sorprendio de que estuviera al tanto, pero para algo era Javi policia, suspendido de empleo y sueldo en la actualidad por un asuntillo que no quiso desvelar y que provocó una mueca de disgusto en Bea cuando se tocó el tema.
- Estamos todos entonces ¿no?- preguntó Tito mientras se levantaba de la mesa y dejaba una pequeña propina al camarero (2 botones de una antigua camisa)
- Mmm, creo que sí- respondió Bea- venga, vayamos al lugar de la cita.
Paseando por entre las familiares callejuelas, apenas cambiadas desde la última vez que las pisaron, fueron a pasar frente a la taberna de Frasco, que presentaba un aspecto ruinoso y abandonado. Un quejido rasgó el silencio de la mañana.
- aquí es donde Chanquete me mandaba a comprar vino peleón.
- Oye Pancho, ¿qué le pasó a la taberna?- preguntó Desi - y toma un pañuelo que te vas a poner perdida la camiseta. Hay cosas que nunca cambian ¿eh?
- algunas semanas despues de que os fuerais, Frasco desapareció en extrañas circunstancias y no se le volvió a ver. El ayuntamiento quiso echar abajo el edificio para construir un bingo, pero siempre que se acercaban los trabajadores, eran recibidos a perdigonazos pero no se sabe muy bien quien era el responsable de los disparos y pronto corrió el rumor de que la casa estaba embrujada.
- bueno, mi olfato policial me dice que el responsable era el mismo Frasco, lo que no queda tan claro es por qué abandonaria el negocio para luego no dejar que el erario público se hiciera cargo de él
- Vale Javi, ya sabemos que eres policia, llevas dando el coñazo con ello desde que te vimos- le dijo Desi con cara de asco.
No pudieron contener su sorpresa cuando descubrieron que la dirección que aparecia en el misterioso mensaje correspondia a la del viejo caserón donde vivia aquel extraño mago que obligo al Piraña a travestirse. Cuando se acercaron a la puerta, vieron en ella un pergamino con otro mensaje: "se lo que hicisteis ese verano"
- A ver, pillastres- increpó Julia- ¿que habeis hecho durante las pasadas vacaciones?
- Pues... pues.... ah bueno- comenzó Javi- hace un par de años dejé embarazada a mi vecina y me mudé de casa antes que aceptar la paternidad del niño.
- No hombre, debe ser algo en lo que todos estuvimos involucrados y ya sabemos cuando fue la última vez que estuvimos juntos- dedujo muy acertadamente Tito - aparte de robar la ropa interior de Desi, no se me ocurre otra cosa...
- ¿cómo? pequeño pervertido, deberia haberte atropellado con mi bici. Bea tuvo que sujetarla para evitar que se pegaran, pero en el forcejeo le dio un bofetón a Pancho y se armó la marimorena.
Mientras los muchachos discutian, ninguno percibió como la pesada puerta metálica empezaba a ceder, cayendo con un crujido sobre Julia, clavandola en el suelo como una alcayata.
- Mirala, al fín ha vuelto a la tierra de donde vino, como siempre quiso- bromeó Tito, recibiendo la mirada reprobatoria de las chicas, que jamás olvidarian cómo las ayudó cuando pasaron de niña a mujer.
Para distender la situación, Javi propuso ir al barco de Chanquete. Para ello tenian que recorrer un peligroso desfiladero, pero como ya el sol estaba saliendo y ninguno de ellos habia bebido, no les importó.
- este desfiladero no estaba antes ¿verdad pancho?
- que va, pero la erosión del mar, unido al cambio climático y al efecto del "niño" en las corrientes marinas hizo que un gran porcentaje de la costa se perdiera..
Pancho no pudo terminar con su disertación, fue interrumpido por el grito desesperado de Desi, que caia al vacio al haber sido golpeada por una lechuga que apareció de no se sabe donde.
- mira, casi parece un angel- bromeó Tito, con bastante mala leche.
Apenados, la menguada pandilla continuó su camino. Al pasar junto al huerto, Pancho no pudo reprimir sus sentimientos.
- Aqui es donde Chanquete me hacia recoger la siembra todas las primaveras, mientras él dormía la siesta... buuaaaaa
- controlate Pancho, no podemos estar toda la vida lamentandolo.
- ya lo se Javi, pero ¿no te das cuenta? nos dejó, se fue al otro barrio, murió... yo pensaba que esas cosas solo pasaban en las películas, y sin embargo... - y volvió de nuevo a su introspectivo llanto sin decir más.
Algo asustados, menos Tito que siempre fue un inconsciente, llegaron por fin al desvencijado barco, al que los años se le notaban demasiado. Ni siquiera las polillas se habian dignado en hacer del imponente navio su cena. Y no hubieran entrado de no ser porque en la puerta habia un papel que asi lo indicaba. Salvo por una pequeña mesa con varias viandas, el interior estaba totalmente vacio. No habia ni rastro de la cama donde Chanquete pasó sus últimas horas, lo que evitó una nueva llorera de Pancho, al que sin embargo le empezaron a asomar las lagrimas cuando vio una tira de paja, con toda seguridad parte en otro tiempo del sombrero que solia portar el viejo marino cuando se ponia a tejer las redes.
Mientras los demás intentaban hallar alguna pista que les ayudara a resolver el misterio, Tito se acerco a la mesa y cogio una rebanada de pan con tomate a la que no dudo en hincarle el diente.
- Mira piraña, ¿quien soy?- dijo mientras se afanaba en introducir la inmensa hogaza en su boca. De haber sabido que esas serian sus últimas palabras, las hubiera elegido mejor, porque resulto que el pan estaba envenenado y Tito cayo muerto al instante sobre la mesa dejando al descubierto un mensaje grabado en ella con algun objeto punzante: "En el mirador encontrareis la muerte, ya vereis".
Bea y Pancho comenzaron a llorar presa de los nervios.
- Nooo, esa mesa era donde Chanquete comía, ¿quien habrá podido destrozarla de esa manera?
-Bueno ya solo quedamos 4 y está claro que debemos tomar el control de la situación. Vayamos al mirador a ver que encontramos- dijo resoluto Javi.
- Mmm, perdona, pero ¿no seria más lógico llamar a la policia?- sugirio el Piraña.
- ¿la policia? yo no me fiaria de un cuerpo que me deja a mi ingresar.
Ante la tensión creciente entre los dos, Bea decidio mediar entre ellos.
- Sometámoslo a votación, pero tu voto no vale por dos ¿eh piraña?
De cualquier forma aunque hubiera valido, no habria conseguido nada, porque fue el único que voto por dejar el asunto en manos de las autoridades competentes.
Para evitar accidentes innecesarios, decidieron volver al pueblo por la playa. La fina arena bajo sus pies les trajo gratos recuerdos, como aquella vez que hicieron el longuis cogiendose de la mano retando al viento. Decidieron detenerse para disfrutar del paisaje, a saber cuando volverian... de pronto, el rumor de las olas se fue haciendo más y más inteligible...
- ¿escuchais eso?- preguntó Bea- viene del mar.
- Te doy, te doy, te doy no más. A ti, asi, al borde del abismo....
En efecto, la música venia de las profundidades del abismo. Pronto Bea se vio hechizada por ella, y sin poder evitarlo, empezo a danzar y a danzar, introduciendose cada vez más en el agua, hasta que finalmente desapareció bajo ella, ante la atónita mirada de los chicos, que habian quedado paralizados por el efecto de la melodía.
Una vez que desapareció toda esperanza de rescatarla con vida, la música cesó y recuperaron el control de sus cuerpos. Un estallido de furia sacudió a Javi. Aunque hacia mucho tiempo que no la veia, no podia olvidar los maravillosos años que pasaron juntos, antes de que ella le pidiera el divorcio al pillarle con una mulata de nombre Divine, en el asiento trasero de su coche patrulla.
- y tu que ¿eh?- increpó a Pancho, que contemplaba impertérrito la escena- ¿ahora no lloras?
- es que a Chanquete no le caia bien- fue todo lo que dijo antes de echar a andar.
- Tranquilizate Javi, venga vamos al mirador con suerte estara alli el asesino y le haremos pagar por todo lo que ha hecho. Piraña lo agarro del brazo tirando de él.
A duras penas, consiguieron llegar. En el centro de la desierta plaza encontraron el cuerpo agonizante de Pancho. Piraña dejo a Javi en un banco y corrio en su auxilio.
- Pancho, tranquilo, te pondras bien- la típica mentira que se suele decir, puesto que el corazón de Pancho no estaba en su sitio
- No importa, ahora soy feliz, me voy con Chanquete.
- pero quien te ha hecho esto, responde, ¿quien?
- la taberna- consiguió murmurar antes de exhalar la ultima bocanada de aire.
Tras conseguir un cuchillo de caza y un bate de baseball en la ferreteria del pueblo, se dirigieron a la tasca de Frasco (única taberna del lugar). Piraña echó la puerta abajo de un cabezazo y se adentraron en la negrura. Todo estaba desordenado. Mesas, sillas, cabezas de toro disecadas... acumulaban polvo por el suelo de la sala. Javi encendió un mechero y la estancia se iluminó lo suficiente como para revelar una puerta secreta tras la barra. Tras ella se extendia una caverna por la cual andaron con precaución, para desembocar en una inmensa sala de alta tecnologia.
En una de las paredes se alineaban sendos tubos semitransparentes en cuyo interior se vislumbraban varios cuerpos humanos
- Bea!!!!- gritó Javi al reconocerla en uno de esos tubos. Dejando de lado cualquier precaucion se abalanzo sobre él, pero al tocarlo, una descarga eléctrica lo dejó inconsciente en el suelo. Al instante las luces se apagaron. Y un foco iluminó el centro de la habitación del cual surgio una tenebrosa figura vestida de negro.
- Soy yo.. Frasco.
- Que sorpresa- dijo con sorna el piraña- quien lo hubiera dicho.
- No te rias de mi maldito.Ahora solo quedas tú y por fín podre llevar a cabo mi maligno plan.
- y podrias decirme cual es?; no se, tengo derecho ¿no?
- ¿que te crees que es esto? ¿un telefilme? No me pase 3 años haciendo de extra en el Minihollywood de Almeria para caer en un truco tan poco elaborado. Y ahora, muere gordo.
El piraña se vio apuntado por una escopeta recortada. Estaba perdido. Espero- pensó - que allí arriba el menú sea bueno, o mejor, espero ir ahi arriba. Cerró los ojos y escuchó el disparo.
Pasaron los segundos pero él seguía de pie en la gélida estancia.
- ¿soy inmortal?- dijo para sí
- abre los ojos hombre- la misteriosa voz venia de detras suya. Le hizo caso y vio el cuerpo inerte de Frasco en el suelo. Al girarse se encontró ante él a un hombre 6 años mayor que él con un humeante revolver en su mano izquierda.
- vaya me has salvado, ¿quien eres?.
- ¿tú tampoco?- gritó indignado el extraño- soy QUIQUE, Q-U-I-Q-U-E. Ya no te acordabas de mí ¿verdad?
- si, si que me acordaba- mintió el tembloroso Piraña siguiendo la máxima de que jamás hay que llevarle la contraria a quien lleva un arma- lo que pasa es que estás tan cambiado... ahora estás mucho más guapo, que no es que antes no lo fueras, bueno ya me entiendes....
- Hombre gracias- los nubarrones desaparecieron de su rostro y Piraña pudo respirar tranquilo- Ayudame a sacar a nuestros amigos de ahi.
- ¿no están muertos? - el Piraña dudaba, nadie podria haber sobrevivido a tantas desgracias.
- que va, Frasco los necesitaba vivos. Planeaba crear una imagen holográfica viva de Chanquete con los recuerdos de todos nosotros, a los que por otra parte nos culpaba de su muerte, por haberle dado tanto el coñazo con problemas que ni le iban ni le venian. El proceso nos hubiera convertido en zombies.
- entonces a ti tambien te envio la carta...
- no, por eso lo maté. Lo que os pase a vosotros me trae sin cuidado, estoy harto de estar a vuestra sombra. De hecho, si no tuviera esta cara de bueno os mataria yo mismo.
Y así, doloridos pero unidos como antaño, cada uno volvió a su casa con la firme promesa de no perder el contacto, menos Quique al cual se olvidaron en el bar del pueblo...